- William Britain Senior (1828 – 1906) fue un fabricante de juguetes de latón que inició su actividad en Londres en torno a 1845 y que en la década de 1880 ya ofrecía un nutrido catálogo de miniaturas mecánicas como el famoso ‘Don Quijote y el molino’ que vemos en la fotografía. Con sus creaciones, la empresa ‘W. Britain’ consiguió sobrevivir a la invasión de juguetes alemanes que dominaban el mercado británico hasta que en 1893, con intención de ampliar su cuota de mercado, se decidió a elaborar soldados de plomo.
- El hijo mayor, William Britain Junior (1860 – 1933) desarrolló técnicas revolucionarias en lo tocante a la inyección metálica en moldes y ello proporcionó a la empresa una enorme ventaja comercial. Sus soldaditos de plomo no eran macizos, sino huecos, y ello permitía a la vez ahorrar metal y también acelerar la producción al reducirse los tiempos de solidificación. Britains fue por tanto el pionero de la técnica del 'hollow casting'. La producción aumentó, las gamas de productos militares se diversificaron y hacia 1906 las tiendas londinenses apenas ofrecían juguetes alemanes, sino creaciones de la familia Britain. Parte del éxito se debió a la estandarización de la escala de sus soldados y caballerías, todos a juego entre sí, midiendo las figuras humanas entre 43 y 53 milímetros. La fábrica de Lambton Road se amplió y comenzaron las exportaciones a la Europa continental y a EEUU. En 1907 la compañía pasó a denominarse ‘Britains LTD.’ y la familia ejerció el control directo sobre esta hasta 1984.
- Tras la Primera Guerra Mundial, con el público hastiado y horrorizado por el conflicto, aparecieron nuevas series dedicadas al mundo de la granja desde 1923. La fórmula de la compañía para combatir la Gran Depresión de 1929 fue diversificar al máximo su producción, cubriendo la demanda de personajes civiles de plomo que caracterizó al mercado de los años treinta. Así proliferaron nuevas colecciones basadas en temas como el zoo, la hípica, el jardín, el circo, policías, cazadores, boy scouts, personajes ferroviarios… Para 1931 ‘Britains LTD.’ contaba con 450 trabajadores y se producían veinte millones de miniaturas al año a pesar de la crisis económica.
- A mediados de la década se pusieron a la venta los primeros coches, camiones y furgonetas de la marca compatibles con las figuras y cuya escala fue 1/32, el estándar que escogió la empresa para sus modelos automovilísticos que la sigue caracterizando en la actualidad.
- De manera excepcional, Britains produjo en 1937 y 1938 dos formidables miniaturas a escala compatible con 1/43 representando modelos británicos de record que resultaron ser formidables por su concepción y que estaban a años luz de los productos ofrecidos por la competencia, encabezada entonces en Reino Unido por Dinky Toys, Taylor & Barrett, Charbens y Johillco entre otros. Es más que probable que el objetivo comercial de Britains fuera una vez más vencer a la competencia alemana, ya que desde 1935 los modelos metálicos de Märklin, entre los que se encontraban numerosos coches de record, causaban furor en Reino Unido. La producción cesó con la Segunda Guerra Mundial y no se recuperó después de esta.
- El Campbell-Railton Blue Bird fue el último automóvil diseñado para batir récords de velocidad utilizado por Sir Malcolm Campbell y era una mole de casi cinco toneladas de peso con motor Rolls Royce de 2.300 CV. Creado en 1933, la versión rediseñada de 1935 alcanzó en septiembre de ese año los 484’955 kilómetros por hora. La miniatura de Britains a escala 1/43 se comercializó desde 1937 y contaba con seis ruedas con neumáticos.
- El espectacular diseño de esta miniatura, pionera en muchos sentidos, permitía separar la carrocería del chasis, dejando a la vista todos los detalles mecánicos, incluyendo el asiento del conductor y el volante que estaba conectado mediante un alambre al eje delantero.
- El Railton Special fue un vehículo de 8’75 metros de longitud y tres toneladas de peso diseñado por el ingeniero Reid Railton y construido en 1938. En septiembre de aquel año batió el record de velocidad en tierra alcanzando 568’58 Kilómetros por hora. La miniatura de Britains reproducía el espectacular diseño a escala 1/43 y se distribuía en una preciosa caja.
- La extraordinaria miniatura de Britains revelaba todos los detalles del interior, destacando la cabina del piloto con asiento y volante.
- Esta lujosa versión cromada estuvo disponible sólo en 1938. Como se produjo y comercializó en pequeñas cantidades, hoy es de una rareza extraordinaria.
- Tras la Segunda Guerra Mundial, Britains recuperó la producción de su gama, actualizando los modelos automovilísticos a escala 1/32, y muy esporádicamente volvió a interesarse por las miniaturas a escala 1/43 con la incorporación de algunos pocos modelos agrícolas. En 1966 abandonó la producción en metal y se ciñó exclusivamente al plástico, aunque se comercializaron pequeñas series conmemorativas metálicas. El interés de la compañía fue centrándose exclusivamente en modelos agrícolas. El último heredero de los Britain, Dennis Britain, decidió jubilarse en 1984 y ningún miembro de la millonaria familia se interesó en continuar con la tradición. La empresa fue vendida a The Dobson Park Group que cambió el nombre de la compañía a Britain Petite Ltd. El centenario de la marca W.Britain se celebró con la creación del W.Britain Collectors Club que cuenta en la actualidad con miles de seguidores por todo el mundo. En 1997 Britain Petite fue adquirida por la empresa americana Ertl que a su vez fue comprada en 1999 por Racing Champions International Ltd. Finalmente, Britains es propiedad del grupo Tomy desde 2011, empresa que ha preservado el espíritu original de la serie.
- En la página web de la marca Britains podrá conocer su oferta de modelos agrícolas en plástico a escala 1/32, así como su reciente serie Big Farm de vehículos de radiocontrol a escala 1/16 que cuentan con luces y sonidos.
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